Briefing del cliente

Sombras y Sangre: El Mundo de los Tiránidos

Este proyecto llegó a nosotros a través de un cliente que buscaba dar vida a su creciente enjambre tiránido. Nos conoció gracias a una recomendación de otro aficionado que había trabajado previamente con nosotros. Tras ver nuestro portafolio y conversar sobre su visión, quedó claro que estaba en las mejores manos para materializar su idea.
La misión era clara: pintar y ambientar la parte tiránida de la caja Leviathan, alineando el esquema de colores con el resto de su colección. Quería un ejército que mantuviera la coherencia visual, con pieles verdes vibrantes, caparazones rojizos y detalles cerebrales iluminados en amarillo. Además, pidió que las lenguas y agallas destacaran en tonos magentas y violáceos, realzando el carácter orgánico y siniestro de estas criaturas.
No era un simple trabajo de pintura. También nos encargó personalizar las peanas para recrear un entorno oscuro y fangoso, con charcos y salpicaduras que intensificaran la narrativa del ejército. Por si fuera poco, solicitó impresiones 3D de bits personalizados para añadir detalles únicos y trabajos de freehand en ciertas figuras, buscando un acabado realmente especial.

Foto del proyecto nivel Juego

El Despertar de la Colmena: Un Ejército Tiránido en Acción

El proceso de dar vida a este enjambre tiránido fue tan desafiante como gratificante. Desde el primer día, nos aseguramos de que cada etapa estuviera documentada para mantener al cliente al tanto de los avances y garantizar que cada detalle cumpliera con sus expectativas.
Comenzamos revisando las miniaturas, que, aunque venían montadas, necesitaban ajustes: había rebabas, piezas sin pegar e incluso restos de matriz. Asegurarnos de que todo estuviera en perfecto estado era fundamental para evitar contratiempos durante el pintado.
La primera fase fue realizar una miniatura de muestra. Una vez aprobada, iniciamos el trabajo en masa, aplicando una imprimación marrón que serviría como base para los verdes vibrantes de la piel. Los caparazones, pintados con pincel para mantener la precisión, recibieron luces profundas en rojo con aerógrafo. Después, detalles como garras, lenguas y dientes se trabajaron a pincel, cuidando que cada miniatura mantuviera la coherencia con el resto del ejército.
Las peanas añadieron un toque especial al proyecto. Con un acabado fangoso y charcos de agua estancada, capturaron perfectamente la atmósfera que el cliente deseaba.