“IN THE GRIM DARKNESS OF THE 41st MILLENNIUM, THERE IS ONLY… RUST”
¡Venga ya! ¿De verdad crees que en la inmensa negrura del milenio 41 lo único que encuentras es guerra? Pues sí, la hay, pero hay algo más que crece como hierba mala… ¡El óxido! ¿Quién lo hubiera imaginado, eh? Estamos en el año 41000 y nadie se ha molestado en inventar un antioxidante decente.
Mira, si te pones a buscar algo chulo que hacer con tus miniaturas, el óxido puede ser tu nuevo mejor amigo. ¿Y sabes qué? Es tan fácil de lograr como quitarte los calcetines después de un día caluroso.
¿Qué aporta? Pues por un lado, le da a tus miniaturas una vibra de ‘He visto cosas que no creerías’. Y por otro, a nivel de color, ese toque anaranjado hace resaltar a tus monigotes como si fueran estrellas de rock en un concierto.
Pero no todo es apariencia. ¿Quieres contar una historia con tus piezas? Pues el óxido te pone el escenario perfecto. Imagínate: cada mota de óxido es una batalla ganada, un golpe esquivado, un ‘No hoy, señor Muerte’. Y si eso no es épico, no sé qué lo es.
Adán
Brush Master
22/06/2023
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Comprendiendo el óxido
En este artículo vamos a mostraros 3 métodos para incluir efectos de óxido en vuestras superficies metálicas de manera sencilla pero muy atractiva.
Además, en uno de ellos utilizaremos un producto que os dará resultados increíbles con un esfuerzo mínimo.
De todos modos, cabe decir que todos estos métodos son compatibles entre sí y aplicables simultáneamente en vuestras maquetas, ya que todas las superficies no se oxidan de la misma manera. La textura, material metálico, imprimación y condiciones ambientales influyen de manera determinante en la oxidación. Aquí algunos ejemplos.
Primer método: Pincel seco
El primer método se basará en la técnica del pincel seco. En esta técnica utilizaremos un pincel del cual eliminaremos la mayor parte de la pintura, y depositaremos pequeñas cantidades de pintura poco húmeda sobre las partes más prominentes de nuestras miniaturas, resaltando texturas y aristas.
Empezaremos imprimando nuestra pieza con una imprimación negra. Una base excelente para cualquier efecto metálico y especialmente para el óxido.
Capa base para el oxído
A continuación, aplicaremos 3 capas sucesivas de colores anaranjados típicos de la oxidación de los compuestos que contienen hierro. Siendo estas:
- Imprimación negra citadel.
- Hull red de AK interactive.
- Medium rust de AK interactive.
- Light rust de AK interactive.
Estos colores son solo sugerencias y cualquier otro color similar de cualquier marca es útil.
Lo más relevante a tener en cuenta es que tiene que existir una diferencia notable entre el color más oscuro y el más claro. De esta manera mantendremos el contraste que permite que el efecto se pueda “leer” correctamente.
Consejos:
– Aplicar cada capa sucesiva de manera desordenada dejando ver la capa anterior. De forma que, al final podamos apreciar tanto el negro de la imprimación como los 3 colores aplicados.
– No os preocupéis por la textura que pueda dejar el pincel. De hecho, esa textura puede ayudar a que el efecto sea más auténtico.
Una vez aplicados los colores acrílicos no metálicos de óxido, aplicaremos la técnica del pincel seco metálico
Utilizaremos 2 colores metálicos, en este caso Cobalt blue de AK (Un metalizado azul intenso) y Gun metal de AK interactive (un clásico color metalizado)
Además de negro de AK interactive, del que más tarde explicaremos su función.
La idea detrás del uso de un metalizado azul sobre una base naranja, se basa en la teoría de color. Podemos observar que el azul y el naranja se encuentran en posiciones opuestas de la rueda. Que conseguimos con esto? La respuesta es un contraste cromático alto. Algo que resulta muy atractivo al ojo.
Pinceles secos metálicos
Daremos sucesivos pinceles secos, cubriendo cada vez menos superficie con cada uno de ellos. Siendo los colores:
- Cobalt blue AK interactive
- Gun metal AK interactive
- Black AK interactive
- Natural Steel de AK interactive
El sentido de este último pincel seco de Negro, es envejecer el metal y generar una ligera pátina de óxido oscuro típico de muchos metales. Además modera el brillo del metal.
En el paso 4 aplicamos un ligero chipping con esponja, para simular los pequeños golpes que ha recibido el metal. Es importante que seamos conservadores con esto, porque si nos excedemos añadiremos ruido innecesario a la pieza. Haremos esté chipping con un metal claro, en este caso Natural Steel de AK interactive.
Finalmente, aquí tenemos el resultado de nuestro primer método. Un oxido viejo bastante realista y no excesivamente llamativo.
Segundo método: Enamel
El segundo método se basa en los productos enamel. Estos son productos similares al óleo cuyo diluyente es el white spirits. Los productos enamel se caracterizan por tener una tensión superficial muy baja, por lo cual se depositan rápidamente en huecos y ranuras, tal como el óxido hace de manera natural.
Además este producto, tiene un tiempo de secado muy alto por lo cual permite aplicar y retirar el producto en función del gusto, sin prisa. También podemos difuminarlo y crear gradientes fácilmente con una esponja.
Estos son los productos enamel que utilizaremos. En resumen, como en el método anterior, son dos colores con mucha diferencia tonal entre sí, con lo cual generaremos contraste.
Chorreo de enamel
Empezaremos como en el método anterior imprimando la pieza en negro y a continuación dando una capa de cualquier pintura metálica oscura. No es relevante la pintura metálica que utilicemos, incluso si no cubre al 100%, esto puede añadir variedad tonal una vez aplicado el enamel.
Ahora aplicaremos los productos enamel.
- Imprimación negra + capa de pintura plateada.
- En primer lugar el tono más oscuro. Lo aplicaremos sin miedo y en una cantidad moderada y antes de que seque, retiraremos el exceso hasta estar satisfechos con el resultado.
- Cuando el primer producto seque, podemos aplicar el segundo, esta vez de manera más conservadora. También podemos añadir algún escurrido, simulando el óxido arrastrado por algún líquido que cae por la superficie del metal.
- Finalmente como en el anterior método un pequeño chipping para simular golpes y nuestro efecto está listo!
Tercer método: El arma secreta
Y ahora el momento más esperado… el arma secreta…
Este es un producto de base alcohólica y secado muy rápido. Al secar genera gradientes con mucho contraste en colores cálidos de manera muy rápida. Básicamente reproduce los parámetros que intentamos plasmar en los anteriores métodos, pero de manera extremadamente rápida. Su handicap… no tenemos verdadero control sobre el efecto y puede que no siempre nos dé el resultado deseado.
Efecto óxido instantáneo
Su aplicación es muy sencilla.
- Empezaremos con una imprimación negra y una base metálica como en el anterior método.
- A continuación aplicaremos el producto y lo dejaremos secar. Podemos simular algún tipo de escurrido si lo deseamos.
- Aplicamos un ligero chipping como en el método anterior y listo.
Consejos:
– Debemos agitar muy muy bien este producto, tiene tendencia a separarse.
– Funciona mejor con temperaturas templadas así que calentarlo ligeramente con las manos o agua caliente antes de usarlo puede ser una buena opción para obtener un resultado interesante.
Como hemos dicho previamente todos estos efectos son compatibles entre sí, queda a vuestra discreción el uso que les deis. Armaduras, escenografía, armas etc… cualquier pieza metálica es susceptible de sufrir corrosión, ¡así que no pongáis límites al óxido! Y recordad… un gran óxido conlleva una gran responsabilidad!!
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